Silvia Martínez Coronel - [Poeta Uruguaia]
El corazón en ajetreado silencio
de voces que se tocan y se miran
resplandece la tarde tras la puerta
me miro y no me creo
sacudo los botones de la ira
los muerdo y los arrojo fuera
no hay niños en la aurora
ven, tráeme la botella
debo caminar aunque sin pasos
debo ir con las tijeras
después de comer tendré el abrazo que me espera
también la daga en las venas
y en el tobogán hacia otras aguas
volveré a casa
aún ajena...
Cuando te dibujo sombras y ocaso
luna y valle , cascada y brisa
Cuando te imagino silencio y abrazo
música, pasto mojado, playa de Bahía
Cuando te desnudo
tacto y caricia
universo pleno
monte y cielo claro
Cuando te miro
sol en el agua
perfume de abrazo
puente hacia la risa
reinvento la esperanza
cabalgo a campo abierto
rescato de lo oscuro a aquella niña
la visto de fiesta, la alzo y la escucho cantarle a la vida.
ETIOPÍA
No tengo más principio que este ahora
una y veintisiete de la madrugada
me deslizo por una noche con sueño
pero no duermo
cubrí la cuota en la tarde y la mañana
el ordenador me mira, lo miro, es un sirviente fiel
él escribe lo que yo le dicto
y sólo pide la energía que sale de mi pared
me descoso el frío de esta hora
te pienso
seguro duermes
imagino tu boca sedienta de mi sed
cierro los ojos
comulgo con la ausencia
los dados no han salido a mi favor
habrá que tirar de nuevo
quién te dice...
pienso en pájaros sin alas
en la boca de un túnel desierto
pienso en la vida que se arrastra bajo las alcantarillas
pienso en las piras de Etiopía
cunas del hambre, lápidas de la codicia
me desato los botones de la sonrisa
me descuelgo del tiempo
estoy sobre mi techo contando las estrellas que han muerto pero siguen regalando su luz
son poetas tendidos boca abajo
con la boca abierta
sin muerte en las costillas del silencio
las hojas caducas se cambian por perennes
y existo y existes y es todo lo que es y no me importa
en esta noche sobre mi techo
en que estás conmigo
estoy contigo
dentro de tu boca.
Me como de un bocado a la tristeza
color malva, color sangre, tormenta de domingo
ruptura de cristales
vidrio molido en las venas
mirada de barcos que se van
llegar después de la cita
silla vacía en el bar
estación donde han muerto los trenes
anverso descolorido de la huida
cortina de uno mismo que no tapa
y deja al descubierto las heridas
me como a la tristeza a golpe de nubes
ay!cómo me río de mi misma
qué calor hace en esta tarde muda
sin dientes, ni lengua, ni caricias.
Amor, llévame a tu lecho,
déjame sentir tu aroma a melodía
envuélveme en tu abrazo
cántame la canción de tus ojos mirándome
dáme la vida
hazme el amor con tu sonrisa
quiero la caricia de tu fuego
quiero sentir salir el alma de tu cuerpo
y tenderse sobre mí y darme abrigo
Amor, quédate conmigo, no te vayas
tu lugar está aquí dónde te siento
entre mis manos retendré tu aliento
entre mis piernas devoraré tu deseo
volarán las palomas de mis senos
las lomas de mis hombros
el sueño de mi sueño
bebe de la fruta de mi boca
quiero decir tu nombre
mientras me tomas
quiero perforar la noche y el día dentro de tu boca
Amor, llévame contigo
a dónde vayas
mi lugar está al ritmo de tus pasos.
Voz: Silvia Martínez Coronel
Silvia Martínez Coronel
Derechos Registrados.
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