Sponsor

AD BANNER

Últimas Postagens

Guido Riggio Pou - [Poeta da Rep. Dominicana]


A la voz de aquel día.

1


Entonces,
recostados
sobre el manto de la tierra,
tapizado
por el beso de las hojas,
tomaré tu aliento
y nos haremos humanos.

2

Descansarán mis alas,
me vestiré de hombre,
encontraré mi sombra,
fatigaré sus huellas
en mi ancestral morada,
el barro.



3

Alargaré mis alas
más allá de la Esfera
y mi luz
será
la sombra.



4

Vestido de anciano,
con mis ojos cerrados
- para que no me vean –
entraré al recinto
de los dioses dormidos,
les soplaré al oído
los susurros del viento
y me darán a esfera
y se abrirá la puerta
de un sueño distinto
para los cansados
sueños
de los hombres.



5

Condenado
en prisiones eternas,
por haber dado
a los aqueos
el sueño de este olimpo,
de estas divinas pasiones
y dioses
dormidos.


6

Temo
al oscuro hueco
donde un día
caerán
mis alas.



7

Vestido de ángel
me asomaré al abismo
de las catedrales muertas,
y habitará en el hombre
el sueño
de mi faz perfecta.

8

Hollaré el granero
de los dioses avaros,
colmaré con su trigo
a los hombres sedientos
y traeré de la tierra
abundante dolor
para los dioses dormidos.



9

Yace
mi imagen de piedra
olvidada de plegarias,
escondida de los cirios,
agobiada de promesas,
despreciada por los llantos
de frustradas oraciones,
por no haber dado
el sueño de los sueños
que ellos llaman
milagro.


10

Esos dioses
avaros
que se hacen rogar,
que atesoran oraciones,
inventaron las plegarias
y con mi vana
esperanza
colmarán sus tesoros.

11

Esos
dioses
aburridos,
cansados de otros juegos ,
inventaron el castigo.



12

No sé
que dios
será
detrás de dios.

que lejos está
el hombre,
más en la sombra.



13

Muchos siglos ha,
escuché la leyenda
en la arcana tierra
que narra la historia
de un libro
de extraño papel
que sirve de ariete,
de grillo,
para atar valientes,
para cortar sus venas.



14

No sé
que frío viento
me soplará
mañana.



15

Cansado
de su soplo eterno,
invocaré al anciano,
me quitaré el vestido,
le mostraré mi pecho,
me clavará su dardo,
descansaré
del tiempo.



16

Invocaron mi nombre
desde lejanas tierras.
Eran los valientes
de las catedrales muertas,
clamando a las piedras
cargadas de siglos
de viejas quimeras.
Fueron los valientes
de las catedrales
muertas.



17

Herrumbraré
su eje.
No girará más
mi cansada
rueda.



18

He cabalgado
en las centellas
buscando la fuente,
el destello primigenio.
Sólo me falta
Volar
a un oscuro cielo,
donde dicen los ancianos
que la luz ,
cansada
y sola ,
besó su sombra.



19

Y escuché
a Dios
orar…
Padre nuestro
que estás
en los cielos…


20

Cansado
de dormir
en la luz,
me dormiré
en la sombra.



21
Y algún día…
Impulsado
por mi sombra,
reemprenderé
mi vuelo.


22

Sueño
el paraíso perdido,
sueñan mis alas
los tiempos idos.



23

Y lloraron
los dioses
su nueva creación
de dolor
y muerte.

Nenhum comentário